sábado, 31 de agosto de 2024

La culminación del viraje de Venezuela hacia la dictadura

El último artículo exhaustivo que publiqué en el blog sobre Venezuela fue en 2017, centrándome en la crisis política entre el oficialismo y la oposición, después de que esta última ganase las elecciones parlamentarias de 2015 y el gobierno de Maduro reaccionase convocando una asamblea constituyente y suspendiese las funciones del parlamento controlado por la oposición. Anteriormente había escrito sobre los problemas económicos a los que se enfrentaba Venezuela y el clima de crispación entre ambos bandos políticos, así como otro artículo cuando murió Chávez en el que hacía una recopilación de todo lo que había sido su gobierno a lo largo de más de una década, y la ilusión que había generado.

Pues bien, la situación política en Venezuela no ha mejorado desde 2017, al contrario, sigue enquistada y cada vez va a peor. En las elecciones presidenciales de 2018 se impidió presentarse a los principales partidos de la oposición, con lo que estos decidieron llamar al boicot electoral, debido a lo cual Maduro fue reelegido con una participación electoral bastante baja, inferior al 50%. 

Como consecuencia de esto, se generó una crisis política que llevó a que en 2019 Juan Guaidó, político opositor y presidente de la asamblea nacional, fuese reconocido por la oposición como presidente legítimo de Venezuela, al considerar la reelección de Maduro como ilegítima. Varios países reconocieron a Guaidó como presidente legítimo, pero al no tener el poder efectivo, de poco sirvió. Hubo un intento de golpe militar por parte de la oposición que fracasó, aunque logró liberar al opositor Leopoldo López del arresto domiciliario al que estaba sometido, para después refugiarse en la embajada española en Caracas y finalmente acabar en Madrid.

Tras el golpe fallido se sucedieron varias rondas de negociaciones infructuosas entre el gobierno y la oposición.


En medio de todo esto cabe destacar el éxodo venezolano. Y es que hubo millones de venezolanos que dejaron el país durante esos años debido a la crisis económica y de devaluación de la moneda.

En 2020 se celebraron elecciones parlamentarias, una vez quedó congelado el proyecto de asamblea constituyente impulsado por el gobierno como forma de contrarrestar al triunfo de la oposición en las anteriores elecciones parlamentarias de 2015. En esta ocasión, la oposición volvió a encontrarse con numerosas trabas para presentarse, con lo que volvieron a llamar al boicot electoral. La participación fue muy baja, superando apenas el 30%. A consecuencia de la falta de alternativa política, el oficialismo logró la inmensa mayoría de los escaños.

Por discrepancias internas dentro de la oposición, el mandato de Guaidó terminó en 2022. Las negociaciones con el gobierno para llegar a unas elecciones presidenciales en 2024 en las que pudiera competir la oposición en igualdad de condiciones continuaron. De hecho, en 2023 la oposición celebró unas primarias con alta participación que eligieron como candidata con una abrumadora mayoría a María Corina Machado, opositora reconocida por entre otras cosas haber organizado el referéndum revocatorio contra Chávez en 2004. Antes, se habían retirado de las primarias otros posibles candidatos como Henrique Capriles - quien ya había sido candidato de la oposición contra Chávez en 2012 y contra Maduro en 2013 - debido a su inhabilitación política, o el propio Guaidó, quien tenía difícil liderar a la oposición desde el exilio.

Sin embargo, sobre Corina Machado se impuso también una inhabilitación política al igual que con Capriles, con el objetivo de dificultar a la oposición tener un líder de peso durante la jornada electoral. La oposición reaccionó con rapidez nombrando a la veterana académica Corina Yoris como reemplazo para Machado. Pese a que no existía ninguna clase de inhabilitación contra Yoris, el Consejo Nacional Electoral bloqueó su candidatura, a lo que la oposición reaccionó nombrando como candidato al ex diplomático Edmundo González.


(De izquierda a derecha, Corina Yoris, Corina Machado, y Edmundo González)

Finalmente se celebraron elecciones. Y pese a que todas las encuestas daban como vencedor a la oposición, el Consejo Nacional Electoral proclamó ganador a Maduro. Eso sí, sin publicar las actas electorales, que en su mayoría se encuentran en poder de la oposición, y que atestiguan sin el menor tipo de duda el triunfo de esta frente a Maduro. Aquí conviene aclarar que en Venezuela, al estar el voto automatizado, una vez contabilizados los votos se imprimen las actas, que se las pueden quedar quienes están en la mesa electoral, y electrónicamente se envían al Consejo Nacional Electoral (CNE). 

Es decir, la oposición cuenta con la mayor parte de las actas impresas, que certifican su victoria, y que publicaron en internet, mientras que el CNE ha publicado los resultados que dan como vencedor a Maduro sin respaldarlo publicando las actas electrónicas con las que cuenta, pues obviamente si lo hiciera quedaría claro que mintieron al anunciar el resultado. Ahora, el tribunal supremo, compuesto por jueces leales al oficialismo, ha ratificado a Maduro como vencedor. 

miércoles, 28 de agosto de 2024

El concierto económico para Cataluña y el sainete de Puigdemont

El año pasado escribí un artículo en el blog en el que analizaba el posible pacto de Sánchez con Junts para que el primero continuase al frente del gobierno en España a cambio de conceder la amnistía a los segundos y que por tanto los "exiliados" que rehuían de la justicia ante una posible condena por su implicación en el procés y que no habían sido indultados debido precisamente a que habían huido de la justicia y por lo tanto no habían sido juzgados, pudiesen volver sin miedo a acabar entre rejas.

Pues bien, la amnistía se acordó en un primer momento para permitir la investidura de Sánchez, y hace unos meses fue definitivamente aprobada después de muchos tiras y aflojas, que entre otras cosas llevaron a ERC, que en aquel momento gobernaba Cataluña, a adelantar las elecciones, en un intento de contrarrestar una posible candidatura de Junts liderada por un retornado Puigdemont una vez estuviese la ley de amnistía en vigor, ya que consideraban que les podía perjudicar electoralmente.

Este adelanto electoral llevó a Sánchez a tomar la decisión de prorrogar los presupuestos estatales de 2023, ante la evidencia de la imposibilidad de negociarlos con unas elecciones de por medio que subirían el listón de demandas a conceder por parte de Sánchez a Cataluña para un posible acuerdo presupuestario.

Una vez se celebraron las elecciones, los números le daban a Illa, el candidato socialista, para gobernar con el PP y Vox, alcanzando milimétricamente la mayoría absoluta con 68 escaños. Pero claro, que el PSOE pacte un gobierno con Vox, o que se sostenga en este partido para gobernar, destruiría todo el discurso de Sánchez de miedo a la derecha, con lo que optó por buscar una mayoría con ERC y los Comunes, que también sumaba 68 escaños.



El resultado fue que ERC, presionados por el buen resultado de Junts, exigió el concierto económico para Cataluña a cambio de apoyar a Illa, y por tanto sacar rédito frente a Junts, haciendo ver que consiguieron cosas importantes mediante la negociación. Para sorpresa de nadie, el PSOE ha cedido, y ERC accedió a investir a Illa después de que sus bases respaldasen el acuerdo con una mayoría ajustada.

Probablemente con un acuerdo de menor envergadura, las bases hubiesen rechazado investir a Illa, dadas las tensiones actuales existentes en el seno de ERC tras los malos resultados electorales, entre un bando liderado por Junqueras y otro liderado por Marta Rivera, quien volvió de su exilio en Suiza gracias a la ley de amistía. Según se alega, además de motivos personales, habría motivos políticos, al haber intentado Junqueras expandir la base de ERC mirando más hacia el PSOE, mientras que Rivera querría volver más hacia una unión de acción de las fuerzas independentistas.

Claro que desde el PSOE no lo llaman concierto, sino acuerdo de financiación singular. Pero como dice el refrán, aunque la mona se vista de seda, mona se queda.

No hay más que ir al detalle del acuerdo para comprobarlo. Cataluña se quedará con el 100% de los impuestos que recaude, y entregará una parte al Estado por las inversiones que este haga en Cataluña, más otra de solidaridad para el resto de España. Cuesta encontrar las diferencias con el concierto económico vasco y navarro.

lunes, 26 de agosto de 2024

Ucrania ataca a Rusia en Kursk, y el caso de Pablo González y los espías rusos

Numerosos han sido los artículos que he escrito en este blog respecto a Ucrania y Rusia desde 2014 con la revuelta del Maidán que echó del poder en Ucrania al presidente proruso Yanukóvich y la posterior ocupación rusa de los territorios ucranianos de Crimea y el Donbás, pasando por un artículo posterior con un tono bastante irónico acerca del autoritarismo de Putin y los estragos que estaba realizando dentro de Rusia y en la política internacional, hasta llegar a 2022, primero con la acumulación  de tropas rusas en la frontera ucraniana y la política de la OTAN, y después con el ataque inicial ruso y la hipocresía de buena parte de la izquierda española al respecto al ponerse de algún modo del lado de Rusia.

A esos artículos les siguieron otros analizando las sanciones puestas en marcha por Occidente, así como el chantaje energético que realiza Rusia a Europa y el auge del precio de la energía y los alimentos como consecuencia de la guerra; el repliegue de posiciones ruso en el frente con Ucrania y los problemas de agilidad en la toma de decisiones en política exterior que genera la obligación de consenso entre los Estados miembros de la UE; la contraofensiva ucraniana en Jerson y Járkov; la movilización parcial en Rusia para aumentar sus efectivos militares para la guerra y la posibilidad de que utilizase bombas nucleares en el frente; hasta llegar finalmente al estancamiento de la contienda en otoño de 2023 debido al atrincheramiento de las fuerzas rusas para frenar cualquier intento de contraofensiva ucraniana y a la falta de aviación en el ejército ucraniano, así como de la rebelión fallida del grupo paramilitar Wagner contra el status quo en Rusia o del apoyo sustancial del líder checheno Kadirov a Putin.

Sin olvidar otro artículo más amplio y reciente sobre la nueva guerra fría en el que entre otras cosas mencionaba el sorteo que se hace de las sanciones para seguir comerciando con Rusia. 

Pues bien, prácticamente un año ha pasado desde el último artículo en el que analizaba la situación en el frente, y si bien sigue habiendo cierto estancamiento, también hay novedades.

La más importante sin duda es la nueva ofensiva que ha lanzado Ucrania en territorio ruso. Concretamente en Kursk. Esto es toda una novedad ya que hasta ahora se había estado combatiendo única y exclusivamente en Ucrania, y si bien se habían producido algunas pequeñas incursiones y ataques en Rusia, estos habían sido bastante anecdóticos.

Así por ejemplo, algunas legiones de voluntarios rusos que combaten del lado ucraniano, habían lanzado incursiones en más de una ocasión en el territorio ruso de Belgorod, que fueron sofocadas en poco tiempo, y Ucrania ha lanzado con cierta periodicidad drones y misiles contra territorio ruso, llegando incluso hasta Moscú, aunque no dejaban de ser meros ataques simbólicos o ataques para dañar nudos logísticos ferroviarios o de suministros rusos, como infraestructuras energéticas.



Pero ahora ha dado un paso más, y en vez de enviar o dar el visto bueno a que vayan voluntarios rusos a combatir dentro de Rusia, Ucrania ha enviado a su propio ejército, y no en una mera incursión, sino a apoderarse de territorio ruso, y ya puestos, a hacer cientos de prisioneros entre los soldados rusos que se rinden a su paso.

Esto conviene analizarlo en profundidad. ¿Por qué Ucrania realizaría un movimiento así? ¿Qué gana con todo esto?

jueves, 22 de agosto de 2024

Las consecuencias del asesinato de Haniyah en Irán por parte de Israel

 Numerosas han sido las entradas que he hecho en este blog acerca del conflicto entre Israel y Palestina en el último año. 

La primera fue tras el ataque de Hamás del 7 de octubre, analizando la barbarie cometida y anticipando lo que podía ser la respuesta israelí. La segunda, cuando esta se produjo, centrándome en el daño a los civiles palestinos, en la inmoralidad de la reacción israelí y en la posible solución de dos Estados.

La tercera, acerca del posible ataque a Rafah, con la involucración de la Corte Penal Internacional en el conflicto de la mano de Sudáfrica, instando a Israel para que limite el daño a los civiles, y en la búsqueda de soluciones de la comunidad internacional para resolver el conflicto presionando para ello a Israel, así como en las negociaciones para un alto el fuego.

Y finalmente la cuarta, abordando la ideología sionista y la radicalización de la sociedad israelí, que explican por qué el gobierno israelí sigue empeñado en la ofensiva en Gaza rechazando los acuerdos de tregua y las presiones internacionales, así como la campaña de boicot y sanciones a Israel como forma de presión, y el supuesto apoyo del público de Eurovisión a Israel.

De esta forma llegamos al momento actual, y desde la cuarta entrada, han sucedido bastantes cosas. Las negociaciones para un alto el fuego continúan, y según EEUU están más cerca que nunca de alcanzarse. Sin embargo, hay quien señala que podría ser una estratagema de presión a Hamás, quien no parece convencida de los términos del acuerdo, para que ceda ante una trampa israelí, y también a Irán, para que postergue un posible ataque a Israel.

Y es que, entre otras cosas, Israel ha asesinado al líder político de Hamás cuando este se encontraba en Irán para asistir a la toma de posesión del nuevo presidente iraní. Aunque Israel no ha reconocido oficialmente ser el responsable, es bastante evidente que la autoría del ataque es suya. Conviene recordar que Israel ya había causado la muerte previamente de varios de los hijos y nietos de Haniyah en un bombardeo en Gaza.


El asesinato de Haniyah es un hecho de la mayor relevancia que conviene analizar desde diferentes vertientes. 

miércoles, 21 de agosto de 2024

La victoria de España en la Eurocopa 2024

 En su día analicé el fracaso de España en el Mundial 2022, y las dudas previas a la Eurocopa 2020 (celebrada en 2021 por la pandemia), centrándome sobre todo en el estilo de juego de posesión, toque y poca verticalidad, así como en las alineaciones y convocatorias de los seleccionadores.

Pues bien, no creo que Luis De la Fuente me haya escuchado, pero sin duda España ha ganado en verticalidad y juego de ataque, y eso ha sido clave para alzarse con la victoria.

Sin duda, la incorporación de nuevos jugadores como Nico Williams y Lamine Yamal, extremos jóvenes por ambas bandas con capacidad de desborde, ha ayudado muchísimo, ya que ha dado frescura al ataque, con jugadores que encaran al rival, regatean, crean ocasiones de peligro, y disparan a puerta. Algo de lo que España estaba muy necesitada.

Pero además de eso, para mí ha sido igual de importante el centro del campo, donde Dani Olmo y Fabián se han consolidado como acompañantes de Rodri. Y esto se debe a su gran calidad, sí, pero también a la fortuna, dadas la lesión previa de Gavi y la posterior lesión de Pedri durante la Eurocopa. Si estos dos no se hubiesen lesionado, posiblemente habrían sido titulares, dejando pocos minutos a Olmo y Fabián en las segundas partes, y probablemente el resultado habría sido diferente.


(Dani Olmo y Fabián celebran un gol allá por 2019, cuando conquistaron el campeonato europeo sub 21 con España)

En mi opinión, el juego de Fabián y Dani Olmo es claramente superior al de Pedri y Gavi. No es que estos dos últimos sean malos, pero para mí, comparados con el nivel de Fabián y Olmo, están un peldaño por debajo.

sábado, 15 de junio de 2024

Elecciones europeas 2024: Resultados y perspectivas

Comenzando por España, y tomando como referencia las elecciones generales de 2023, el PP ha subido ligeramente y el PSOE ha bajado ligeramente. Si tomásemos como referencia las elecciones europeas de 2019 el cambio sería mayor, pero sería un poco como hacerse trampas al solitario, ya que en 5 años suceden muchas cosas, entre otras que Ciudadanos ha desaparecido del mapa y sus escaños los ha absorbido el PP.

También hay que tener en cuenta la participación, ya que en 2019 fue inusualmente alta (60%) al coincidir con unas elecciones municipales, mientras que esta vez se ha quedado ligeramente por debajo del 50%, en la media de la UE.

Resulta sorprendente que el PSOE se mantenga por encima del 30% de los votos pese a la aprobación de la ley de amnistía, que por cierto, apenas han tardado 48 horas después de la jornada electoral para hacerla efectiva a través de su publicación en el BOE. Se ve que desde que el 30 de mayo la aprobó definitivamente el Congreso de los Diputados, no habían tenido tiempo para ello. O más bien ganas.

Está claro que su discurso de la máquina del fango, el numerito de parar 5 días por la presión de "la derecha y la extrema derecha", y las alusiones al "lawfare", han conseguido movilizar a su electorado para al menos mantener la tensión y evitar el desplome, en unos momentos críticos por la aprobación de la ley de amnistía y la investigación a la mujer y al hermano de Pedro Sánchez por posible tráfico de influencias.

Él asegura que es todo mentira y un montaje de la derecha para presionarle y quebrarle. Si es así, lo tendrán que dictaminar los jueces. Pero es curioso cómo recurre a esa estrategia cuando algo le afecta a él o a alguien de su ideología, pero no lo consideran así cuando es a alguien de la ideología contraria.

Está claro que los partidos políticos y asociaciones afines han recurrido a la justicia para intentar conseguir ventaja política. Por ejemplo con el caso Cifuentes, que se negaba a dimitir pese al escándalo del máster, está claro que alguien filtró el vídeo en el que aparecía hurtando productos en una sección de perfumería para perjudicarla.

También es evidente que la filtración sobre la investigación de Hacienda a la pareja de Ayuso se hizo en el momento preciso para perjudicarla y contrarrestar la investigación a la mujer de Sánchez.

Es bastante obvio que los partidos políticos guardan dossiers de sus rivales para utilizarlos cuando estimen oportuno. Ya lo advirtió en su día Jordi Pujol cuando empezaron a investigar a Convergencia, al advertir que caerían todas las ramas.


En cualquier caso, está bastante claro que a la izquierda le gusta hablar de montajes cuando afecta a los suyos, ya se llamen Lula, Rafael Correa, Begoña Gómez, o Pablo Iglesias, y a la derecha lo mismo cuando les afecta a ellos, ya se llamen Trump, Boris Johnson, Rita Barberá, Camps o Esperanza Aguirre.

En mi opinión hay que dejar trabajar a la justicia, quien sabrá discernir lo que es delito de lo que no. Los políticos se atacarán unos a otros, y deberían ser lo bastante inteligentes para saber hasta dónde pueden llegar.

Por cierto que apuntaban desde el PNV que no descartan que haya una repetición electoral en Cataluña (dado que Junts exige al PSOE que invista a Puigdemont como president, y ERC no quiere pactar con Illa al no ser que haya concierto económico para Cataluña) y que Sánchez lo haga coincidir con una repetición electoral nacional, para tratar de desligarse del cerco de Junts. Claro que para eso el espacio de Sumar tendría que recomponerse primero. 

Decíamos que el PSOE mantiene un suelo de votos muy considerable. Sin embargo puede deberse en parte al hundimiento del espacio de Sumar y Podemos, que acudían divididos a las elecciones por primera vez. Si en las generales de 2023 obtuvieron el 12,3% de los votos, ahora, sumando el porcentaje de Sumar y de Podemos, ni siquiera llegan al 8%. Esto comparado con las europeas de 2019 no es tan grave, ya que se traduce en 5 escaños en vez de 6. Pero comparado con las generales de 2023, y teniendo en cuenta que en unas generales no hay circunscripción única sino provincial, los resultados son catastróficos, se mire como se mire.

lunes, 13 de mayo de 2024

Boicot a Israel como única forma de presión para lograr la paz

 Israel sigue ultimando el asalto final a Rafah pese a la oposición de EEUU, quien ha anunciado que podría dejar de suministrarle armamento ofensivo, y pese a que Hamás habría aceptado una propuesta de alto el fuego planteada por Qatar y Egipto.

La pregunta que nos tendríamos que hacer es ¿por qué? ¿Por qué Israel sigue empeñado en atacar Rafah pese a que Hamás ha aceptado una propuesta de tregua y pese a que no cuenta con el apoyo de su mayor aliado, EEUU?

La respuesta es a la vez sencilla y compleja. Empezando por la parte sencilla, el gobierno israelí no tiene como prioridad liberar a los rehenes secuestrados por Hamás, ni tampoco llegar a una paz duradera con los grupos palestinos, ya se denominen Hamás, Yihad Islámica, Al Fatah, o el Frente Popular por la liberación de Palestina. 

¿Entonces qué es lo que busca el gobierno israelí? Según alegan, acabar con Hamás por la fuerza bruta, para que un ataque como el del 7 de octubre no se vuelva a repetir. Y si para ello tienen que asaltar Rafah, pese al inmenso peligro que corren los civiles atrapados allí y las escasas posibilidades que tienen de ponerse a salvo y de recibir ayuda humanitaria, no le temblará el pulso en hacerlo, aunque eso signifique también que EEUU pueda empezar a bloquear la ayuda que proporciona a Israel.

Podría parecer comprensible que quieran acabar con Hamás, dada la brutalidad del ataque del 7 de octubre, para asegurarse, como afirman, de que algo así no se vuelva a repetir. Pero es que atacar Rafah no garantiza que vayan a acabar con Hamás. E incluso aunque lo "consiguiesen", entendiendo por ello acabar con los máximos líderes de Hamás, como Yahya Sinwar, líder de Hamás dentro de la franja de Gaza y al que se considera como ideólogo y líder en la sombra de los ataques del 7 de octubre, eso no garantiza que en un futuro Hamás u otro grupo de ideología similar surgiese entre la población palestina y llevase a cabo un ataque similar o peor que el del 7 de octubre.


Lo único que garantizaría la paz de Israel con los palestinos sería que Israel reconociese al Estado palestino, acordasen una delimitación de las fronteras, y cesase la ocupación en Cisjordania. Con algo así, la mayoría de los palestinos estarían dispuestos a convivir, y aquellos que siguiesen abogando por la destrucción de Israel, cada vez serían menos y más aislados. Incluso Hamás ha dicho que de darse el caso dejarían las armas para convertirse en un partido político.

Pero el problema es que el gobierno israelí no quiere reconocer al Estado de Palestina, ni cesar la ocupación en Cisjordania. ¿Por qué? Pues básicamente porque es un gobierno extremista. Y aquí es donde la explicación de por qué insiste en atacar Rafah pasa a ser de simple a compleja. Para entender al gobierno israelí hay que entender su historia y los grupos políticos e ideológicos que lo sustentan. Y eso pasa por entender qué es el sionismo.

sábado, 20 de abril de 2024

La guerra fría sigue presente

 Nos creíamos que con el derrumbe de la Unión Soviética y del bloque comunista en Europa del Este el mundo ya era unipolar y se agrupaba bajo la democracia y la economía del mercado, pero nada más lejos de la realidad.

Si bien ciertos países de Europa del Este se han incorporado exitosamente a la Unión Europea o van camino de ello, aún persisten en algunos de ellos tendencias prorrusas, como se puede comprobar con los actuales gobiernos de Hungría, Serbia y Eslovaquia, o con ciertos partidos políticos en Croacia.

Tras el espejismo de Yeltsin, Putin ha devuelto a Rusia a la época de la URSS, en cuanto a enfrentamiento con Occidente se refiere, así como en cuanto a control interno de la población. Lo ha ido haciendo progresivamente, eliminando a los opositores molestos, y comprando voluntades de otros opositores que han reducido el nivel de sus críticas para secundar el discurso y hacer de Putin en los grandes temas. Así por ejemplo, el partido comunista, que era la principal oposición a Putin, ha ido cada vez más graduando su discurso, hasta el punto de que sus resultados en las elecciones presidenciales (nunca exentas de fraude) no llegan ni siquiera al 5%, cuando antaño rozaban el 20%.

De este modo, uno de los opositores más molestos en los últimos tiempos para Putin, Alexander Navalny, murió en prisión en circunstancias poco claras, donde cumplía condena en el Ártico en condiciones realmente duras por "extremismo", tras haber sido envenenado en 2020, hecho que casi le costó la vida. Pese a ello, y aunque estaba claro quien era el autor del envenenamiento tras otros precedentes como el del ex espía ruso Litvinenko, asesinado por envenenamiento en Reino Unido tras enfrentarse a Putin y revelar en un libro que el FSB (los servicios secretos rusos) estaban detrás de la ola de atentados en los años 90 que llevaron a Putin al poder con la promesa de "limpiar" Chechenia, Navalny decidió volver a Rusia para continuar su campaña contra la corrupción y ofrecer una alternativa política a Putin a los rusos. Nada más aterrizar fue encarcelado, y 4 años más tarde, ha muerto.


Boris Nemtsov, líder político que aspiraba a enfrentarse a Putin, y también muy popular entre los rusos, fue asesinado a tiros en 2015. Otras opositoras, como las feministas Pussy Riot, pasaron por la cárcel tras cantar sin autorización en una iglesia, y al final acabaron exiliándose, o como Kasparov, campeón mundial de ajedrez, que también trató de enfrentarse políticamente a Putin, y se topó, al igual que Navalny, con la muralla burocrática del régimen ruso, que impide con excusas, trabas y requisitos imposibles a nuevos partidos políticos que pueden resultar molestos para el régimen, presentarse electoralmente. Temiendo por su vida, decidió exiliarse en el extranjero. Como ha tenido que hacer la última prensa libre que quedaba en el país, el diario Novaya Gazeta, donde por cierto publicaba Anna Politkovskaya, periodista muy crítica con el régimen, quien fue asesinada en 2007 en circunstancias muy extrañas.

sábado, 24 de febrero de 2024

Israel entre la paz y el genocidio

 Desde que escribí mi última entrada sobre la ofensiva de Israel en Gaza, las cosas no han mejorado. Más bien al contrario. Israel ha continuado empujando a los ciudadanos de Gaza hacia el sur, y desde hace unas semanas está anunciando que va a atacar también Rafah, que es la última localidad de Gaza antes de llegar a Egipto.

¿A dónde van a ir el millón y medio de personas que se han refugiado en Gaza provenientes de otras ciudades de la Franja? A Egipto no parece probable, pues el gobierno egipcio bien que se está apresurando a levantar un muro de contención para asegurarse de que no entren.

Esto puede parecer inhumano, y seguramente lo sea, pero hay que entenderlo desde dos vertientes. La primera, que Egipto no quiere aceptar un millón de refugiados a los que tiene que alimentar y cuidar, por todos los problemas de gestión y económicos que conllevaría. Y la segunda, y si cabe más importante, es que si entran, no hay ninguna perspectiva de que vayan a salir. Es decir, Israel habría conseguido su objetivo de expulsar a palestinos de ese territorio y anexionárselo, con lo que los refugiados en Egipto lo serían de forma permanente, no temporal.

Israel en cambio sigue con la retórica de querer acabar con Hamás y para ello insiste en que debe atacar Rafah. Poco le ha importado la resolución de la Corte Internacional de Justicia después de que Sudáfrica presentase el caso por posible genocidio, en el que se le insiste a tomar todas las medidas necesarias para evitar daños a civiles. Si decide bombardear Rafah, estará claramente incumpliendo la resolución de la Corte.


sábado, 9 de diciembre de 2023

¿Es que nadie va a parar a Israel?

 Hace dos meses escribí una entrada en este blog en el que analizaba y condenaba el ataque de Hamás perpetrado el 7 de octubre contra Israel, y especulaba sobre sus posibles consecuencias, tanto de represalia israelí como de respuesta internacional.

Pues bien, como se preveía, la respuesta israelí ha sido brutal. No es solo que hayan bombardeado y entrado físicamente en Gaza con el objetivo de acabar con Hamás. Es que se sospecha que un posible objetivo oculto de Israel con esta incursión y campaña militar en Gaza sea expulsar a los palestinos que habitan allí de forma definitiva, anexionándose Israel el territorio.

Porque por mucho que se escuden en que están combatiendo a Hamás y en que estos utilizan a los civiles como escudos humanos, lo cierto es que buena parte de los ataques israelíes se han llevado por delante vidas de miles de civiles, la mayor parte de ellos niños, y es que además, algunos ataques han sido directamente contra infraestructura civil que no tenía nada que ver con Hamás, por mucho que Israel se empeñase en decir que sí.


(Gráfico con cifras de la campaña militar israelí durante estos dos meses. Como se puede ver la cifra de muertos supera ya los 20.000, de la cual la inmensa mayoría son civiles, entre ellos más de 8.000 niños y 4.000 mujeres. Y por cierto, estas cifras, que Israel decía que eran inventadas por Hamás, ahora han reconocido que son bastante ajustadas a la realidad).

sábado, 14 de octubre de 2023

El acto barbárico de Hamás y la respuesta israelí

 En relación a los últimos acontecimientos que están sucediendo en Israel y Palestina, primero y más importante: Lo que ha hecho Hamás es barbarie pura.

Puedo comprender que quieran romper el cerco de la Franja de Gaza a la que les está sometiendo Israel (económico, comercial, de circulación de personas…), y que para ello decidan romper la valla con excavadoras.

Puedo entender también que asalten bases militares israelíes y tomen ciudades cercanas a Gaza. Al fin y al cabo, Israel está llevando a cabo una ocupación en un territorio que no le pertenece, con lo que parece legítimo que los ocupados traten de resistirse, incluso por las armas, y recuperar el territorio que les pertenecía.

Puedo comprender que para ello haya intercambio de disparos con soldados israelíes y que haya bajas. Es lógico que eso suceda en un enfrentamiento militar.

Ahora bien. Lo que no puedo comprender de ninguna manera, es que unido a todo lo anterior, a alguien le parezca buena idea ponerse a asesinar civiles que estaban tranquilamente en sus casas, familias enteras, o gente joven que simplemente estaba disfrutando de un festival de música.

¿Qué delito habían cometido? ¿Ser judíos? ¿Estar en el lugar y en el momento equivocados? Asesinar, violar y raptar civiles, es, ahora, antes, y siempre, barbárico, se mire como se mire, y lo haga quien lo haga.

jueves, 21 de septiembre de 2023

La guerra en Ucrania se ralentiza

 Después del éxito de la última ofensiva en verano - otoño de 2022 que permitió a Ucrania recuperar Jérson en el sur y grandes porciones de terreno en Járkov, al este, había muchas esperanzas puestas en la próxima ofensiva una vez hubiese finalizado el invierno, sobre todo teniendo en cuenta que al fin los Estados occidentales decidieron suministrar tanques a Ucrania. Aunque con cuentagotas y poco a poco, EEUU, Reino Unido, Alemania, Polonia, Francia, República Checa, Eslovenia, y en menor medida España, Holanda, Noruega, Suecia, Finlandia, Canadá, Portugal y otros entregaron tanques a Ucrania.


Sin embargo, esta ofensiva está avanzando más lento de lo que muchos esperaban, lo que se debe a varios factores.

Por un lado, los rusos han cambiado la estrategia, y han pasado de atacar a defender. Es decir, se conforman con el territorio ganado hasta ahora, y se han dedicado a atrincherarse, al más puro estilo Primera Guerra Mundial, en una guerra de posiciones más que de movimientos. De este modo, si Ucrania quiere recuperar terreno, tendrá que hacer frente a la línea de defensa rusa "Surovikin", denominada así por el general ruso que la ideó, y que consiste en campos de minas, defensas de acero, fosos, trincheras, ríos sin puentes, o hacer frente a inundaciones después de que aparentemente Rusia volase presas de agua.


(En esta imagen se puede comprobar como los rusos han levantado trincheras y defensas cerca de la línea del frente en el sur de Ucrania para frenar la contraofensiva ucraniana).

miércoles, 30 de agosto de 2023

Rubiales como síntoma de los problemas del fútbol español

 Luis Rubiales ha pasado de ser alguien conocido únicamente entre quienes seguíamos el fútbol, a ser conocido en toda España. Y no precisamente por algo bueno, sino por su negativa a dimitir y su cerrazón a aferrarse al cargo cuando todo el mundo le instaba a dimitir.

Después de que la selección española femenina de fútbol lograse un hecho histórico, alzarse con la copa del mundo, y en medio de la celebración, a Luis Rubiales, presidente de la federación española de fútbol, no se le ocurrió otra cosa que plantar un beso en la boca a una jugadora, al parecer sin su consentimiento. En un principio, él alegó que fue producto de la euforia, y que se había equivocado

Pero como las explicaciones no parecieron suficientes, y entre otras cosas se alegó que se había presionado a la jugadora para que quitase importancia al asunto o dijese que fue consentido, pues la bola fue creciendo. Cuando parecía que no le quedaba otra salida que dimitir, en una asamblea de la federación que había convocado sobre la marcha, y viendo que muchos de los asistentes a dicha asamblea (presidentes de clubes, de federaciones territoriales, árbitros, representantes de jugadores, entrenadores...) le habían ido retirando poco a poco su apoyo hasta ese momento incuestionable, Rubiales decidió ser Rubiales, y enrocarse en el cargo acusando a los medios de cometer un "asesinato" contra su persona, y diciendo que el beso fue consentido. Su madre ha salido en su apoyo y se ha puesto en huelga de hambre encerrándose en una iglesia.


Rubiales ya tiene varias denuncias, y la FIFA decidió intervenir apartándole del cargo durante 90 días, pues el asunto traspasó las fronteras nacionales para convertirse en noticia internacional. El gobierno español poco puede hacer, pues para retirarle del cargo debe suspenderle el Tribunal Administrativo Deportivo (TAD), probando que cometió una falta muy grave, y aún está pendiente de que emita la resolución.

martes, 29 de agosto de 2023

Sánchez y el PSOE derriban todos los límites

 Aún recuerdo cuando en 2016 el PSOE se revolvió internamente ante la posibilidad de que Sánchez pactase con Podemos, ERC y Bildu para poder gobernar, y acabaron destituyéndole, alegando que no podían quedarse subordinados a los nacionalistas y que era mejor abstenerse y dejar gobernar al PP.

Parece que de ese PSOE de 2016 ya no queda nada, o al menos muy poco, pues está totalmente silenciado. Como es de sobra conocido, Sánchez se rehízo y en 2017 logró volver al frente del PSOE en unas primarias en las que derrotó a Susana Díaz llevando el no al PP como bandera. Apenas un año después articulaba una moción de censura que contó con el apoyo de Podemos y de los nacionalistas para derribar al PP del gobierno, alegando que era necesario dada la corrupción existente en dicho partido. 

Y en 2019 pese a que en un primer intento se negó a integrar a Podemos en el gobierno y forzó unas segundas elecciones, después decidió integrarles, apoyándose a menudo en los nacionalistas para sacar adelante determinadas leyes.

A cambio les ha ido concediendo ciertas cosas. Ya prácticamente todos los presos de ETA están en cárceles del País Vasco y a muchos se les está concediendo el tercer grado. Algo que por otra parte tampoco es tan extraño porque al fin y al cabo ETA está disuelta. Pero a nadie se le escapa que con el PP en el gobierno esto no habría sido así.


También concedió indultos a los líderes del procés que fueron condenados, y reformó el delito de malversación y eliminó el de sedición. Obviamente no lo hubiese hecho si no se lo hubiesen exigido para sostenerle en el poder.

Pues bien, hoy en día, después del resultado de las elecciones generales, ya no es solo que siga apoyándose en Podemos (hoy Sumar), ERC y Bildu, sino que además por la aritmética parlamentaria, debe hacerlo en Junts, un partido que siempre ha estado en el boicot, negándose a pactar con el PSOE y reclamando la amnistía y el referéndum de autodeterminación, y que tiene a su máximo líder huido en Bélgica.

sábado, 26 de agosto de 2023

El mercado del fútbol se tambalea ante la pujanza saudí

 Desde hace años venimos asistiendo a una transformación en el mundo del mercado del fútbol que este último año se ha multiplicado exponencialmente.

Es evidente que desde hace muchos años hay clubs grandes que han conseguido más triunfos y más seguidores, y por tanto más dinero, precisamente para poder fichar mejores jugadores, continuar ganando, y continuar acumulando seguidores y dinero, en un círculo vicioso que hace que los clubs más modestos tengan muy difícil entrar, al tener menos seguidores y por tanto menos dinero y peores jugadores.

Dentro de la liga española los clubs grandes serían el Real Madrid, el Barcelona y el Atlético de Madrid. Y fuera de la liga española podríamos citar al Bayern de Múnich, al Manchester United, al Liverpool, al Inter de Milán, al Milán, o a la Juventus de Turín.

También hay otros clubs medianos históricos que sin llegar al nivel de los grandes, se suelen mantener en un nivel intermedio, ya que cuentan con cierto número de seguidores, como pueden ser el Valencia, la Real Sociedad, el Athletic de Bilbao, el Sevilla o el Betis.

Y fuera de España podríamos hablar de la Roma, del Nápoles, de la Fiorentina, del Parma, del Arsenal, del Tottenham, del Everton, del Borrusia de Dortmund, del Olympique de Lyon, del Olympique de Marsella, del Schalke 04, o de equipos de otras ligas como el Ayax, el Feyenoord, el PSV, el Galatasaray, el Besiktas, el Fenerbache, el Olympiakos, el Panathinaikos, el Benfica, el Oporto, el Sporting de Lisboa...entre otros.

De vez en cuando hay algún club aspirante que consigue entrar o consolidarse dentro de los medianos, o al menos quedarse cerca, debido a una buena gestión económica y deportiva. Ha sucedido con el Villarreal por ejemplo, que hace 30 años no eran nadie y ahora son indiscutibles en Primera División e incluso juegan competiciones europeas.

Y está sucediendo con otros clubs a menor escala como el Girona o el Andorra, que nunca destacaron pero que gracias como digo a la buena gestión económica y deportiva, se están empezando a consolidar, el Girona en primera división, y el Andorra en segunda.