Estamos ante los últimos días de la segunda etapa de Ancelotti al frente del Real Madrid. Como al final de su primera etapa, se va después de una temporada en la que no ha ganado ninguno de los tres principales títulos que disputaba (Liga, Champions y Copa del Rey).
Esto demuestra entre otras cosas que si alguien quiere ser entrenador del Real Madrid, está obligado a ganar cada temporada al menos uno de estos tres títulos. Si no, lo tiene muy difícil para seguir, independientemente de que en temporadas anteriores, como ha sucedido con Ancelotti, Zidane o Mourinho, hubiesen ganado uno o dos de esos tres títulos.
Incluso a veces, el ganar títulos no significa que continúes, como sucedió con Vicente del Bosque, de quien Florentino Pérez consideraba que no tenía una imagen suficientemente moderna como para ser entrenador del Real Madrid, pese a los buenos resultados que estaba obteniendo. En su lugar optó por Carlos Queiroz, quien estuvo un año y al no ganar nada fue reemplazado. Igual que le sucedió a Pellegrini, primera apuesta de Florentino Pérez en su segunda etapa.
Ahora llegará Xabi Alonso como entrenador. Le deseo lo mejor, como no podía ser de otra manera. Pero en el recuerdo está la breve estancia en el banquillo del Real Madrid de José Antonio Camacho, Rafa Benítez, o Julen Lopetegui, otros tres entrenadores españoles que apenas duraron unos meses en el banquillo, renunciando o siendo relegados de su puesto por el mal juego y los malos resultados, o por no verse con la capacidad suficiente de dirigir a la plantilla. Esperemos que no le suceda eso a Xabi Alonso, aunque como digo, hay precedentes. Y desde luego si los resultados y el juego no acompañan, me temo lo peor.
(De arriba a abajo y de izquierda a derecha, todos los entrenadores del Real Madrid bajo las órdenes de Florentino Pérez (a excepción de Santiago Solari): Vicente del Bosque, Carlos Queiroz, José Antonio Camacho, Mariano García Remón, Vanderlei Luxemburgo, Juan Ramón López Caro, Manuel Pellegrini, José Mourinho, Carlo Ancelotti, Rafa Benítez, Zinedine Zidane, y Julen Loepetegui).
De momento, parece que Xabi Alonso va a tener algo que Ancelotti no tuvo en su último año, y es refuerzos en la plantilla. Es cierto que el Real Madrid fichó a Mbappé. Pero más allá de eso, se hablaba de que el Real Madrid necesitaba nuevos jugadores en defensa y el centro del campo, y Florentino Pérez decidió no fichar a nadie para esas posiciones.
Esto, unido a las desafortunadas lesiones de larga duración de Carvajal y Militao, y a la difícil recuperación de su lesión de Alaba, dejó la defensa del Real Madrid muy tocada.